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[Cristo Ahnsahnghong] Apacienta mis ovejas
Author
Eliseo fiel
Date
2022-09-30 14:15
Views
753
Dios vino a salvar a los pecadores siendo el Cristo. Él anduvo el camino doloroso llevando, la cruz pesada. El único deseo era buscar a sus hijos perdidos. Soporttaba todos sufrimientos y aflicciones con el gozo de buscar a sus hijos. Al momento en que ascendiera al cielo, dejó la última petición a sus discípulos.
Jn.21:15 Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿ me amas más que éstos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos.... Le dijo: Pastorea mis ovejas ... Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas
Jesucristo dijo: Si me ama, apacienta a sus ovejas. Él predicaba el evangelio desde muy de mañana para buscar a sus pueblos. Su última petición era apacentar a sus ovejas. Cuando tengamos su corazón amoroso, podremos cumplir su última petición. ¿No es asì ?
Ahora, Dios Padre y Dios Madre han venido en cuerpo y están buscando a sus hijos con el corazón ardiente. Su petición es también buscar a sus hijos esparcidos en el mundo entero. Cumplamosla con el mismo corazón de ellos.
Jn.21:15 Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿ me amas más que éstos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Él le dijo: Apacienta mis corderos.... Le dijo: Pastorea mis ovejas ... Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas
Jesucristo dijo: Si me ama, apacienta a sus ovejas. Él predicaba el evangelio desde muy de mañana para buscar a sus pueblos. Su última petición era apacentar a sus ovejas. Cuando tengamos su corazón amoroso, podremos cumplir su última petición. ¿No es asì ?
Ahora, Dios Padre y Dios Madre han venido en cuerpo y están buscando a sus hijos con el corazón ardiente. Su petición es también buscar a sus hijos esparcidos en el mundo entero. Cumplamosla con el mismo corazón de ellos.
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Ya que los hijos de Sion son nacidos de nuevo gracias al amor sacrificado del Padre y de la Madre celestiales, debemos llevar a cabo nuestra santa misión de buscar y salvar a nuetros hermanos de la familia celestial.
Predicaremos y enseñaremos diligentemente la palabra de Dios al mundo sin olvidar que si me ama, apacienta a mis ovejas
Y los guiaré al Padre y a la Madre celestiales.
Así como Dios nos condujo al camino de la salvación dándonos la verdad a seguir, compartamos y prediquemos esta buena noticia de salvación a las personas que aún esperan la voz de Dios en la oscuridad.
La Palabra de Dios es alimento espiritual. Cumplamos la misión evangélica de repartir el alimento al rebaño que Dios nos ha encomendado de vez en cuando y enseñando y guardando todo lo que nuestros Padres Celestiales han mandado.