Se dice que las profecías de Dios deben cumplirse, y lo mismo ocurre con las palabras de la última calamidad.
Si ocurre en esta tierra un gran desastre que nunca se ha visto desde la creación del mundo, ¿cómo podemos salvarnos de él?
El método también debe encontrarse en la Palabra de Dios.
Dios nos dijo que huyéramos a Sión.
Y debemos guardar la Pascua, la señal del paso de la calamidad.

Dios ha hablado del fin desde el principio. También hizo numerosas profecías a través de la Biblia y mostró que se cumplieron. Esto es para que nosotros también podamos creer que hay un juicio final. La manera de salvarse de la última calamidad en esta tierra y la manera de salvarse de la última calamidad en el mundo de los espíritus es guardar la Pascua del nuevo pacto, y recibir la promesa de convertirse en hijo de Dios.

Los que reciban la salvación y van al cielo en el día del juicio final tienen las características de guardar los mandamientos de Dios y creer en el Padre y la Madre celestiales, los salvadores en la època Espíritu Santo.
No cometamos el error de perder la salvación, que es el fin de la fe, sino seamos hijos de Dios elohim que se aferran a la salvación.

La Biblia profetiza que habrá grandes desastres en los últimos días. La forma de salvarse de ese desastre es guardar las reglas del nuevo pacto según la Palabra de Dios. Doy gracias a Dios Elohim por darnos a conocer las reglas del nuevo pacto.

Dios nos ha dado sus mandamientos y las fiestas solemnes del nuevo pacto a fin de que preperemos el día de juicio. Todas las cosas que están sucediendo en todo el mundo nos muestran que ese día está muy cerca. La manera de escapar ese día es seguir sus palabras y guardar sus mandamientos como el día de reposo y la Pascua del nuevo pacto, y anunciarlos al mundo entero.

Como el pueblo de Dios, tenemos que obedecer y guardar todas sus enseñanzas en gozo. Dios desea darnos la vida eterna, la salavación y la bendición, así que todas sus palabras son provechosas para nuestro espíritu y provienen de su inmenso amor.

Despierta. Digo a mi mismo.