Doy gracias a Dios Padre y Dios Madre que nos aman incondicionalmente y se sacrifican por nuestra salvación. Nosotros también imitaremos el amor de Dios y nos convertiremos en hijos de Dios que llevarán a la humanidad a la salvación.

Jesús dijo que a menos que una persona nazca de nuevo, no puede entrar en el reino de Dios.
Para que seamos salvos, es importante guardar los mandamientos de Dios, pero también es importante ser transformados en la naturaleza divina.

Sigamos las enseñanzas de Dios Padre y de Dios Madre e imitemos el carácter de Dios
para entrar al reino de los cielos.

Nos convertiremos en hijos de Dios que son agradecidos en todas las circunstancias, siempre se regocijan y obedecen la Palabra de Dios para que podamos ser transformados a semejanza de Dios. La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundail es una iglesia llena de amor que actúa según la Palabra de Dios.

Doy gracias a Dios Elohim que siempre nos educa con lecciones correctas para que podamos ir al cielo.

Dios ha dado a los hijos celestiales la promesa de la preciosísima y grandiosa vida eterna por medio de la sangre preciosa de Dios, para que lleguen a ser participantes de la naturaleza divina (2 Pedro 1:4). Por lo tanto, como hijos de Dios, debemos obedecer esta palabra y obtener la vida eterna e ir al cielo.

Los que creen en Dios, no guardan las palabras de Dios, no podrán ir al reino de los cielos.

Nuestra naturaleza es pecaminosa, pero a través de las enseñanzas de Dios, debemos nacer de nuevo con un carácter que se asemeje a Dios. La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial (IDDSMM) sigue las enseñanzas de Dios.

Así como Dios nos salva a través de su santo sacrificio y nos ama, también nosotros debemos convertirnos en hijos de Dios Padre y de Dios Madre que practican el amor del dar.