Recibamos el agua de vida que nos dan el Padre y la Madre celestiales, recibamos el perdón de los pecados y la vida eterna, y volvamos al cielo. Damos gracias a Dios por ser nuestros Padres celestiales.

Doy gracias a Dios Elohim que vino en la carne y nos dio el agua de vida que nunca tendrá sed.

Solo Dios Padre y Dios Madre pueden darnos el agua de la vida, la vida eterna. Por lo tanto, debemos encontrar ellos para ser salvos. Hasta el fin, sigamos a Dios Elohim.

La gracia especial que Dios concede a los santos que van a recibir la salvación es la bendición para conducir a la humanidad al mundo de la luz mostrando la gloria de Dios Madre en un mundo oscuro y sin la verdad.

Damos gracias a Dios Padre y a Dios Madre por darnos el agua de la vida. Debo pensar en la gracia de la salvación y vivir siempre una vida de gratitud.

Doy gracias al Padre Celestial y la Madre Celestial que me da el agua de la vida.

La razón por la que pudimos nacer en esta tierra es porque no sólo mi padre sino también mi madre.
Lo mismo ocurre con Nuestras almas. La razón por la que el alma pudo existir es porque existe no sólo el Dios Padre, sino también el Dios Madre.
La Biblia dice que sólo el Espíritu Santo y la esposa nos dan vida eterna. Se puede obtener la vida eterna confiando en el Padre, el Padre, la Madre, el Sacerdote y el Dios Santo.

Para recibir el agua de la vida, debes conocer al Espíritu Santo y a la Esposa.
Aprendamos sobre Dios Padre y Dios Madre, el Espíritu Santo y la Esposa, como lo testifica la Biblia, en la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial.

En los últimos días, junto con Dios Padre, Dios Madre nos da el agua de la vida.
Si no aceptamos a Dios Madre, no podemos recibir el agua de la vida.
La Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial cree en Dios Madre.

La Madre es el fuente del agua de la vida. Debemos creer en Dios Madre y Dios Padre.