Dijo que las profecías de la Biblia no desaparecerán, ni una jota, ni una tilde, y todo se hará realidad.
Ese hecho no cambia si la gente lo cree o no.
Aunque los judíos en ese momento no creían en Jesús, quien vino de acuerdo con las profecías de la Biblia hace 2,000 años, Jesús ciertamente vino como un salvador y enseñó la verdad de la vida.
Aquellos que creyeron en las profecías de la Biblia y aceptaron a Jesús fueron bendecidos, y aquellos que no las creyeron y las rechazaron fueron destruidos.
Incluso hoy en día, están el Espíritu Santo y la Esposa que vinieron a esta tierra según las profecías de la Biblia.
Ya sea que el mundo les crea o no, el Padre Ahnsahnghong y la Madre Celestial nos dan el agua de la vida sin costo alguno.
Aquellos que reciban el agua de vida recibirán la vida eterna y la bendición de entrar en el reino de los cielos, y aquellos que no la reciban serán excluidos de la salvación.

Amén. Hay muchas ocasiones en las que las palabras de las personas no se hacen realidad.
Sin embargo, las profecías de Dios seguramente se harán realidad cuando llegue el momento de la profecía.
Quiero convertirme en un hijo de Dios que cree y cumple las profecías de Dios y participa de la gloria que Dios permite.

Las profecías de Dios seguramente se harán realidad. No olvidemos que la gloria de Dios se revelará a aquellos que no desprecian las profecías y las siguen en obediencia.

Las profecías de la Biblia son ciertas. Seguramente también ocurrirá la catástrofe final. Debemos encontrar una manera de escapar de esa calamidad a través de la Biblia. Dios permitió que Sion mantuviera las fiestas como un lugar para evitar desastres.