Así como los israelitas en la antigüedad eran esclavos en Egipto, los humanos de hoy son esclavos espirituales del pecado y la muerte en un mundo de pecado.

Juan 8:32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
33 Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres?
34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Apocalipsis 1:5 y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre,

Jesús dijo que a través de la sangre de Cristo podemos ser libres del pecado.
Estas palabras significan que podemos ser liberados del pecado por la verdad con la sangre de Cristo. La verdad con la sangre de Cristo en la Biblia es la Pascua del nuevo pacto.

Mateo 26:17 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, vinieron los discípulos a Jesús, diciéndole: ¿Dónde quieres que preparemos para que comas la pascua?
18 Y él dijo: Id a la ciudad a cierto hombre, y decidle: El Maestro dice: Mi tiempo está cerca; en tu casa celebraré la pascua con mis discípulos.
19 Y los discípulos hicieron como Jesús les mandó, y prepararon la pascua.

Mateo 26:26 Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
27 Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
28 porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.

Jesús nos liberó de la esclavitud del pecado mediante la Pascua del nuevo pacto.
En la época del Antiguo Testamento, la Pascua se guardaba con la carne y la sangre de las ovejas de la Pascua, pero en la época del Nuevo Testamento, la Pascua se guardaba con la carne y la sangre de Jesús. La realidad de la oveja de la pascua en el Antiguo Testamento es Jesús.

1 Corintios 5:7 Limpiaos, pues, de la vieja levadura, para que seáis nueva masa, sin levadura como sois; porque nuestra pascua, que es Cristo, ya fue sacrificada por nosotros.

Así como fueron liberados los israelitas que guardaron la Pascua según lo ordenado por Jehová Dios en el Antiguo Testamento, los santos que guardaron la Pascua del Nuevo Pacto como enseñó Jesús en el Nuevo Testamento pueden ser liberados del mundo de pecado. Si quiere estar libre de pecado, debe guardar la Pascua del nuevo pacto. Como enseñó Jesús, la Iglesia de Dios está guardando la Pascua del nuevo pacto. Para ser liberados de la esclavitud del pecado y la muerte e ir al cielo eterno, debemos guardar la Pascua del nuevo pacto.