La Biblia nos dice que éramos hijos de Dios que vivíamos en el reino de los cielos.
Entonces, ¿por qué vinimos a esta tierra?
Cuando nacimos como seres humanos en esta tierra, perdimos nuestros recuerdos celestiales. Pero Dios nos ha enseñado a través de la Biblia.

Is. 59:1-2  He aquí que no se ha acortado la mano de Jehová para salvar, ni se ha agravado su oído para oír; pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho ocultar de vosotros su rostro para no oír.

Dios ha revelado que nuestras iniquidades han hecho que nos separemos de Dios.
La razón por la que los ángeles que vivían en el reino de los cielos nacieron y vivieron en forma humana en esta tierra fue por el gran pecado cometido en el reino de los cielos.
Por eso, Dios vino a esta tierra con la buena noticia de que podemos regresar al cielo para los que viven sin saber este hecho.

Lc. 19:10  Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.

Mt. 9:13  Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.

Dios vino a esta tierra para salvarnos a los pecadores y estableció la Pascua del nuevo pacto con la bendición del perdón de los pecados.

Mt. 26:19  Y los discípulos hicieron como Jesús les mandó, y prepararon la pascua.

Mt. 26:26-28  Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo. Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.

Dios estableció la Pascua para perdonar los pecados de la humanidad, que está destinada a morir a causa de sus pecados cometidos en el cielo, y para llevarlos al cielo.
Guardemos la Pascua y regresemos al cielo, la patria de nuestras almas.