La biblia menciona dos tipos de personas. Uno es los hombres de la tierra como Adán, primer hombre. Otro, los hombres del cielo como Jesús, postrer Adán. Solo Éstes podrán entrar en el reino de los cielos.

1Co. 15:47~49 El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo. Cual el terrenal, tales también los terrenales; y cual el cielo, tales también los celestiales. Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial.

Adán es el hombre de la tierra, y Jesús es el hombre del cielo. Y nosotros, que hemos traído la imagen del terrenal, seremos transformados a imagen del celestial, a través de Jesús nuestro Dios.

1Co. 15:50~ Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción. He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seres transformados, en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta

Así, la biblia dice que solo los hombres del cielo serán transformados incorruptibles. En otras palabras, los hombres que tengan la vida como Cristo serán transformados del cuerpo celestial.

Jn. 6:54~ el que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero...el que come mi carne y bebe mi sangre, en mi permanece, y yo en él. Como me envió el Padre viviente, y yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí.

El que come la carne de Jesús y su sangre será un ser espiritual y eterna. En otras palabras, los que participan en la carne y sangre de Cristo serán transformados incorruptibles. Por lo tanto, tenemos que participar en su carne y su sangre. La manera de comer su carne y su sangre es guardar la Pascua del nuevo pacto ( Mt.26:26~28). Para esto, Jesucristo la dejó en este mundo. La única iglesia que la guarda es la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial. Los miembros de ella son los hombres del cielo.