La pascua es la ordenanza que Jesús guardó con sus discípulos antes de morir en la cruz. Para dar el perdón de los pecados y la vida eterna a través de la pascua, Jesús quería y quería celebrar la pascua. Apreciemos y guardemos también la pascua.

Mucha gente sabe acerca de la Última Cena, pero no mucho acerca de la Pascua.
Sólo conocen la Pascua del Antiguo Testamento y no saben si existe la Pascua del nuevo pacto.
De hecho, el día de la Última Cena fue la Pascua.
Jesús nos dio Su carne y Su sangre a través del pan y el vino de la Pascua.
También dijo que los que guardan la Pascua tendrán vida eterna.
Por tanto, guardemos también la Pascua, verdad de vida que el mismo Jesús nos permitió, y recibamos la bendición de la salvación.

Jesús dijo que el pan de la Pascua sería su carne y el vino de la Pascua sería su sangre.
En otras palabras, Jesús, nuestro Dios estableció la Pascua del nuevo pacto que es la Última Cena con su sagrada sangre para darnos el perdón de los pecados.
Debemos anunciar verdadero significado de la Última Cena, y guardemos la Pascua del nuevo pacto con todo nuestro corazón.

La Pascua del Nuevo Pacto es una verdad preciosa que nos permite volvernos uno con Dios y recibir la vida eterna al comer y beber la carne y la sangre de Dios. Guardemos la preciosa verdad de la Pascua, que nos transforma en vida eterna, a quien no puede evitar la muerte.

La Pascua es la fiesta de Dios con la promesa del perdón de los pecados y la vida eterna.
Damos gracias y alabanza al Espíritu Santo ya la Esposa que restauró la Pascua.