El centro de nuestra fe es Dios. Dios vino como humano hace dos mil años y nos mostró el ejemplo de fe que la gente debe caminar.

Mateo 12:8 "porque el Hijo del Hombre es Señor del día de reposo."

Jesús dijo que él es el Señor del día de reposo, quien instituyó el día de reposo y nos lo dio.
Y al dar el ejemplo de guardar el día de reposo, enseñó que el día de reposo (sábado) es la voluntad de Dios.

Lucas 4:16 "Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer."

El día de reposo es la ordenanza de Jesús. Es decir, la ley de Dios.
Los apóstoles que aceptaron a Jesús como el Cristo también loguardaron en cada semana según las enseñanzas de Jesús.

Hechos 17:2–3 "Y Pablo, como acostumbraba, fue a ellos, y por tres días de reposo discutió con ellos,
declarando y exponiendo por medio de las Escrituras, que era necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los muertos; y que  Jesús, a quien yo os anuncio, decía él, es el Cristo."

Hechos 18:4 "Y discutía en la sinagoga todos los días de reposo, y persuadía a judíos y a griegos."

Así como recibimos las enseñanzas de Dios a través de la Biblia cada día de reposo, el apóstol Pablo predicaba y exhortaba la palabra en la sinagoga cada sábado.
Se puede ver que el día de reposo se guardó continuamente incluso en la historia de la iglesia primitiva.

Debemos guardarlo que Dios ha establecido como el camino de la vida.
Hoy en día, hemos sido bendecidos para guardarlo a través de las enseñanzas del Padre celestial y la Madre celestial, quienes son los Señores del día de reposo.

Debemos proclamar diligentemente al mundo de la importancia del día de reposo del séptimo día y que Dios Creador, quien es el dueño del día de reposo, ha venido a esta tierra.