Dios nos muestra su amor por nosotros a través del sacrificio. Él derramó su sangre para llevar nuestros pecados. Si no hubiera tenido gran amor por con nosotros, no habría venido en cuerpo, ni se habría sacrificado en vez de nosotros.

Ro.5:8 Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. Pues mucho más, estando ya justificados en su sangre, por él seremos salvos de la ira.

La biblia nos testifica que éramos pecadores que habíamos cometido gran pecado contra Dios. Sin embargo, él nos perdonó sacrificándose a si mismo. Por el hecho de que se hizo carne y que murió llevando nuestros pecados podemos entender que él nos ama muchisimo.

Su gran amor para con nosotros no se terminó en su primera venida, sino sigue siendo válido en esta época en cuanto nuestro Dios ha venido a salvarnos en cuerpo por segunda vez.

He.9:28 así también Cristo fue ofrecido una sola vez para llevar los pecados de muchos y aparecerá por segunda vez, sin relación con, para salvar a los que le esperan.

Si él nos dejara en este mundo oscuro y no viniera otra vez, ¿ cómo podríamos tenido la esperanza de recibir la salvación ? Ya que Dios tiene gran amor por nosotros aun pecadores, no nos abandonó ni nos dejó en destino de condenación.

Además, en cuanto venga por segunda vez no vendrá solo, sino con su esposa, nuestra made celestial.

Ap. 22:17 y el Espíritu y la Esposa dicen, Ven, y el que oye, diga: Ven... y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.

Ellos son Dios Padre y Dios Madre. Ellos son cariñosos y amables por sus hijos pecadores. Por esta razón, han venido en cuerpo y se están sacrificando a si mismos en todas sus vidas. Sin embargo, nunca nos reprenden ni paran de sacrificarse en un momento, sino que trabajan dia y noche y dia a día llavando nuestra carga pesada del pecado.

No es posible ni suficente expresarse su gran y infinito amor por nosotros aunque tuvieramos muchos labios y hubieran miles de expresión de gratitud. No es comparable nuestro amor por ellos con el amor de ellos por nosotros. Les doy gracias con todo mi corazón por permitirme su gran amor y por haberme sentirlo en mi corazón.