Debemos mostrar nuestra fe en Dios a través de la obediencia.
La Biblia dice que la obediencia es mejor que el sacrificio.
Después de todo, nuestra adoración a Dios también es obediencia a la Palabra de Dios, pero no es posible agradar a Dios solo a través del servicio de adoración externo sin hacer todas las demás palabras.
Dios dijo que los que no obedecen no pueden entrar en el reino celestial de la Canaán espiritual, y que son incrédulos.
Si creemos en Dios, debemos obedecer las palabras dadas para nuestra salvación en completa obediencia.

Obedeceremos las palabras del Padre y la Madre celestiales y caminaremos por el camino restante de la fe.

Los que obedecen la palabra de Dios pueden entrar en el reino de los cielos.
Por el contrario, si desobedece la Palabra de Dios, no puede ser salvo.
Aunque nuestros pensamientos sean diferentes a la Palabra de Dios, si están en las enseñanzas de la Biblia, debemos seguirlas con alegría.
Esa es la verdadera obediencia y el camino a la salvación.
Obedezcamos todas las palabras de Dios Padre y Dios Madre y recibamos las bendiciones del cielo.

Obediencia es abandonar nuestros pensamientos y actuar de acuerdo a la Palabra de Dios. Cuando esta clase de obediencia sea perfeccionada, podréis entrar en el reino de los cielos que Dios ha preparado para vosotros.

Soy un pecador que vine a esta tierra por mi pecado de desobediencia. Por lo tanto, al practicar la obediencia perfecta, puedo prepararme para el camino al cielo. No debo olvidar la voluntad de Dios, que me mostró el ejemplo de la obediencia hasta la muerte, obedeceré las palabras del Padre y de la Madre para recibir la corona de la vida.

Dios se agrada cuando obedecemos plenamente en las palabras de Dios más que nuestras ofrendas de sacrificio; mostremos, pues, plena obediencia a las palabras de Dios, excluyendo nuestros propios pensamientos.

Como los profetas de la fe en la iglesia primitiva, tengamos fe para obedecer la palabra de Dios al 100%. Así que recibamos la bendición de reinar para siempre en el cielo eterno.

por la obediencia de la palabra de Dios Elohim podemos entrar el reino de los cielos.

La obediencia a Dios es obedecer la Palabra de Dios. Convirtámonos en el pueblo de Dios que obedece la palabra de Dios.

La historia de todos los ante pasados de la fe que han sido salvos nos muestra que obedercer todas las reglas y convenios puestos por Dios es la manera de ser bendecido y llamado como santo de Él.