como no pddemos llevar una vida sin la ayuda de otros a causa del límite de nuestra capacidad, así tampoco podemos vivir sin la ayuda de Dios. por eso debemos orar a Dios, quien conoce nuestras debilidades y nos ayuda.
mt.7:7-8 pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. porque todo aquel que pide y el que busca, halla y al que llama se le abrirá.
en el camino de la fé, tendremos que encarar muchas cosas que pedir, buscar y llamar. cuando pidamos, busquemos y llamemos según las palabras de Dios, nuestro deseo serán concedidos.

hace dos mil años, Jesús les dijo a los miembros de la iglesia primitiva que oraran porque derramarían dones del Espíritu Santon que es el regalo de Dios en el día de Pentecostés. Al creer en la promesa y orar, los santos recibieron el poder del Espíritu Santo y pudieron predicar la salvación que Jesús les dio por todo el mundo.
hechos 2:1-4
cuando llegó el día de pentecostés, estaban todos unánimes juntos....
asentándose sobre cada uno de ellos y fueron todos llenos del espíritu santo, y comensaron a hablar en otras renguas, según el espíritu les daba que hablasen.

También necesitamos el poder del Espíritu Santo para anunciar a nuestro Padre y Madre Celestiales, quien es el Salvador en esta última época, y también para predicar la bendición de la salvación.
Debido a que no podemos hacerlo con nuestro poder y fuerza, necesitamos la ayuda del Espíritu Santo.
La única iglesia que guarda la Fiesta de Pentecostés es la Iglesia de Dios. Que podamos recibir dones del Espíritu Santo prometido por Dios aquí y anunciar la salvación que el Padr y la Madre celestial proporciona a todo el mundo.